Había sido la mejor noche de mi vida, todo gracias a él, aún podía sentir con que delicadeza tocaba cada parte de mi piel. Seguía dormido. Me puse la camisa que Danny llevaba puesta la noche anterior y salí al balcón. Lluvia. Dejé que la lluvia me mojara, me gustaba sentir como cada gota recorría mi piel. Sonreí. Idea. Cerré el balcón y entré.
- Buenos diaaaaaaas amor! – grité mientras le saltaba encima
- Estás empapadaa! - lo sabía, seguí riéndome y saltandole encima.
- Que quieres hacer hoy? Tu eliges…
- Pues mira, quedarme aquí, abrazado a ti todo el día. ¿Te parece?
- Haber majo, me encantaría, pero quiero conocer Madrid. Porfa, porfa – le puse puchero, nunca falla.
Danny se vengó de la mojadura y se me tiró encima para hacerme cosquillas. Risas. Risas. Más risas.
“So just remember to smile smile smile, and turn the world around”
El resto del día fue normal, comimos con Samu y luego ruta por Madrid. Cuando llegamos estábamos agotados. Nos acostamos, hablamos, nos reímos de los chistes malos de Danny y no recuerdo más, me quedé dormida…
No hay comentarios:
Publicar un comentario